domingo, 27 de enero de 2019
BUSCANDO RESPUESTAS EN EL INCONSCIENTE
sábado, 12 de enero de 2019
EL CAMINO YA ESTA HECHO
SUEÑO 1:
Cómo lo dice el título, el camino ya está construido hace algún tiempo. A mí izquierda, hay una oscura mansión en lo alto (una imagen como de la Universidad Federico Santa María en Valparaíso). Yo iba por el camino el cual era como una carretera rápida y baja de doble vía.
Mientras yo viajo por el camino, hacia abajo, en sentido inverso vienen dos personas, ambas a cada lado del camino. Uno de ellos, alto y reposado, mientras el otro, muy rápido, y moviendo los brazos por delante del cuerpo y cara alocadamente (me hizo acordar a un compañero de la PUCV- el gacela).
Al principio del sueño, aparece Sergio Z . Muy grande y claro. Tenía una actitud simpática y amistosa.
Al final del camino había que subir una loma, la cual se encontraba cerrada con una malla perimetral acma. En la puerta de acceso, desde abajo veía de portero a Jorge Pedreros (ex Digeder), pero al llegar arriba, y también dentro del perímetro, estaba la señora Aurora. Ella me permitía el ingreso y yo la saludaba con un amistoso cómo está doctora?. Ella se sorprendía por el saludo.
SUEÑO 2: previo a quedarme dormido, apliqué variantes del método Feldenkrais.
Me encontraba sentado con más amigos en un lado de una mesa larga. Al otro extremo y solo, estaba sentado Roberto A.
- otro que comenzó va jugar el mismo juego escuchaba en el estado hipnopómpico.
SUEÑO 3:
Iba a una velocidad muy rápida, era imposible que alcanzará a detenerme a tiempo para poder ir a casa, cuando me doy cuenta que debo frenar, no encuentro el freno y sigo de largo por el camino que en aquel tiempo se llamaba Bellavista.
viernes, 11 de enero de 2019
ESCENARIO DE SUEÑOS
jueves, 3 de enero de 2019
UNA SORPRESA INESPERADA
Ayer, mientras esperaba a mi hijo mayor, pasó frente a mí, a unos dos metros, mi hija Paula y su madre Ana Luisa. Con Anita no tenemos contacto hace mucho tiempo y tampoco con Paulita, desconozco si ella sabe algo de mi persona.
Para ser claro, yo la he visto en muy pocas oportunidades. Eso lo convenimos hace muchos años atrás, cuando Paulita era sólo un bebé. Recuerdo que la conocí cuando ella tan sólo tenía menos de dos semanas. No recuerdo de qué año. Cada cierto tiempo me las ingenié para verla, a veces desde mucha distancia y la mayor de las veces con vista de ella de espalda.
La experiencia de ayer fue tan sólo a dos metros, y aunque fue solamente un instante, pude ver su lindo rostro con lentes. Lo súbito de la experiencia no me permitió reaccionar, y sólo atiné a mirarla con mucho amor de padre.
Probablemente no sería capaz de reconocerla si anduviera sola, sin su madre. Pero el encuentro con ella fue algo que considero un gran regalo en este nuevo año que comienza.
Intenté seguirla con la mirada para ver hacia donde se dirigían, ambas ingresaron al retail del mall de Rancagua.
Al minuto apareció mi hijo, y luego de saludarle le conté lo ocurrido. Enseguida ingresamos al mismo retail pero Paula y Anita habían desaparecido.
El acontecimiento me ha alegrado aún más mi vida desde ese momento.