Mucho tiempo esperé por esta oportunidad, sin embargo, como algún día dijo mi padre, en esta vida es mejor satisfacer los deseos que no hacerlo y quedarse con las ganas.
No recuerdo haber andado tan feliz por la vida como estos últimos dos meses, es casi como si tuviera una polola nueva, de la cual estuviese enamorado y ese amor fuera compartido. Podría decir que es un sentimiento casi como de amor adolescente, y no me avergüenzo de ello, todo lo contrario, estoy feliz de sentirlo.
Creí que esta nueva experiencia iba a ser más difícil, sin embargo, he aprendido a conocer a paso a paso esta nueva situación, he aprendido a dominarla y disfrutarla. Todo el proceso ha sido un deleite.
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