lunes, 5 de septiembre de 2011

Casi Como un Oráculo

Hace mucho tiempo tuve un par de experiencias oníricas las que recuerdo frecuentemente. Una de ellas, debe haber acontecido hace unos 10 años, la cual a continuación paso a relatar:

"Venía velozmente conduciendo solo una motocicleta, era tarde, estaba oscuro, diría más o menos madrugada. Subitamente mientras viraba por una calle, surge un camión, creo de la basura, y como era oscuro, me costó reaccionar; lo pude evitar, sin embargo aún así me dio un pequeño topón que desestabilizó mi vehiculo y se dirigió a toda velocidad en contar de la acera. Mi cuerpo sale despedido por el aire, yo me sentía suspendido y fuí a descansar a bastante distancia del lugar del vehículo liviano, azotando mi cabeza (con casco) contra la cuneta. El golpe fue severo, y mientras surgían los últimos pensamientos antes de morir, estos daban cuenta de mi estado de aquel entonces... así que esto es todo... y finalmente moría. No había dolor, tampoco había sufrimiento. Tan sólo un darse cuenta del precario estado en que me encontraba y más aun había sido embestido por un vehículo bastante pesado. Creo que venía de una fiesta y lo había pasado muy bien".


La segunda experiencia que surge de mi mente, también en forma frecuente, aunque como lo son los recuerdos correspondió al tiempo en que yo acababa de adquirir un pequeño vehículo, era antiguo y lo tendría que poner a punto paso a paso. El sueño al que me refiero es relativamente breve, sin embargo lo relataré como lo recuerdo actualmente:

"Un avión, más bien antiguo iba volando, aparentemente sin problemas, era del mismo color que el automóvil que yo había comprado, subitamente el avión pierde el control, desestabilizándose completamente y al frente había una montaña en donde colisionaría inminentemente. Yo miraba la escena desde cierta distancia y desde abajo".

Este segundo sueño debe haber acontecido hace unos 6 ó 7 años atrás. Probablemente el recuerdo de él se deba al episodio ocurrido hace poco en la isla Juan Fernández y que dio cuenta de la muerte de muchas personas conocidas, queridas y necesarias para el país.


Ambos sueños actualmente ponen nuevamente un freno a mi motivación que surge desde hace mucho y que evidentemente me ponen en riesgo...